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Salud y humanidad | Dra. Yocelyn Guerrero

La fiebre es uno de los principales motivos de consulta médica en la edad pediátrica. Por falta de información algunos padres pueden padecer de fobia a la fiebre. Esta se caracteriza por miedo irracional y exagerado frente a la fiebre, asociado a creencias erróneas sobre su origen y desenlace, llevándolos a asumir conductas inapropiadas para detectar y manejar los episodios febriles en el hogar. Fabio Nelson Figueroa y cols. Cali, Colombia 2012.

La fiebre es probablemente el síntoma más frecuente en los niños y por lo tanto una de las razones más comunes para buscar atención médica en la edad pediátrica. McCarthy encontró que 20% de los niños en los servicios de emergencias tenían fiebre, 18% de ellos por encima de 40°C; en la práctica privada, 26% de los niños menores de 2 años que asisten al consultorio lo hacen por fiebre y de ellos el 15% presentan temperaturas mayores de 40°C; más de 20% de las llamadas telefónicas fuera del consultorio son por esta razón y otro 30% se relacionan con entidades que tienen la fiebre como uno de sus síntomas. Correa. Bolivia 2001.

La misma constituye uno de los primeros motivos de consulta en atención primaria, hecho que todos los médicos  comprobamos diariamente y es avalado por múltiples estudios. Sin duda es también el síntoma que más preocupación causa en la familia del niño enfermo. Por tal razón a continuación presentamos información importante acerca de la fiebre y su manejo en el hogar.

Concepto.   Se define la fiebre como una temperatura corporal por encima de lo normal, que varía según el área de su medición: rectal por encima de 38°C, oral por encima de 37.8°C y axilar por encima de 37.2°C. La temperatura corporal promedio es de 37ºC y en condiciones normales puede oscilar  durante el día desde valores como 36.1°C en la mañana (5 a.m.) hasta 38°C en la tarde.

Manejo de la fiebre en casa.

Use el termómetro, no determine la fiebre solo al colocar la mano sobre la frente del paciente.  Mantenga una temperatura ambiental fresca o agradable.  El paciente debe vestir ropas ligeras.  No lo debe abrigar.  Ofrecer  muchos líquidos a tolerancia.  No es necesario correr a bajar la fiebre si no está muy elevada, a menos que el paciente presente molestias, generalmente a partir de 38-38,5ºC. Se debe administrar los antipiréticos autorizados por su médico, a dosis correspondientes y en intervalo de tiempo debidos.  No alterne medicamentos en su manejo.  Los baños con agua templada la disminuyen poco, pero puede usarlos para ayudar a los antipiréticos. Evite usar compresas de alcohol o de agua fría.

Acuda al servicio de urgencias en las siguientes circunstancias.

 Si el paciente menor de 3 meses de edad.  Si está adormilado, decaído o muy irritable. Si tiene antecedentes o presenta por primera vez una convulsión.  Si se queja de dolor de cabeza intenso o vomita varias veces.

Es muy importante recordar que la fiebre no siempre es mala, no es una enfermedad por sí misma, si no, que puede ser indicio de una infección, virus, reacción inmune u otras causas que deben ser debidamente diagnosticadas y que la misma responde al trabajo de nuestro sistema inmune a fin de combatir estas causas.

Dra. Yocelyn Guerrero

Santiago, R.D.   29/08/2018