El Secretario General de la ONU expresó conmoción y dijo estar profundamente preocupado por las graves denuncias hechas hoy contra el expresidente de la Asamblea General de la ONU, John Ashe.

Al transmitir la reacción de Ban Ki-moon, su portavoz, Stephane Dujarric dijo a la prensa que las acciones descritas son un golpe contra la integridad de la Organización.

Dujarric recordó que hasta el momento se trata de acusaciones y que la Secretaría estudia lo ocurrido. Al propio tiempo recordó que el presidente de la Asamblea General no se subordina al Secretario General y que en el desempeño de sus funciones goza de plena independencia.

John Ashe, ex-embajador de Antigua y Barbuda, fungió como presidente de la Asamblea General desde septiembre de 2013 a septiembre de 2014.

Las autoridades estadounidenses anunciaron hoy que Ashe y otras cinco personas, incluido un diplomático dominicano, fueron detenidos en el marco de un multimillonario caso de corrupción.

Según documentos hechos públicos por la Fiscalía Federal del Distrito Sur de Nueva York, Ashe está acusado de recibir más de 500.000 dólares en sobornos por parte de un constructor que buscaba desarrollar un centro de conferencias de las Naciones Unidas en el territorio chino de Macao.