Desde el comienzo del Decenio del Océano en 2021, liderado por la UNESCO, se han puesto en marcha más de 500 proyectos en todas las regiones del mundo para mejorar el conocimiento y la protección del océano.
En la reunión con la comunidad internacional en Barcelona, Audrey Azoulay, Directora General de la UNESCO, agradeció estos importantes esfuerzos e hizo un llamamiento para continuar con esta dinámica positiva.Del 10 al 12 de abril, la UNESCO y España acogen en Barcelona la Conferencia del Decenio del Océano 2024, uno de los mayores encuentros de la comunidad oceánica mundial que se celebrarán este año. Se esperan más de 1500 participantes —jefes de Estado y de gobierno, expertos, ONG y colaboradores del sector privado— para hacer balance de los avances del Decenio de las Naciones Unidas de las Ciencias Oceánicas para el Desarrollo Sostenible (2021-2030), liderado por la UNESCO, y anunciar nuevas iniciativas.
Desde 2021, hemos progresado mucho basándonos en nuestros tres pilares: comprender, educar y proteger. Se están implementando más de 500 proyectos en unos 60 países y se han movilizado más de mil millones de dólares. Pero aún queda mucho por hacer. Debemos seguir invirtiendo en ciencia, continuar educando, alertando, concienciando. Movilizarnos al máximo es la única alternativa que nos queda para salvar el océano.
La conferencia contribuirá a definir la hoja de ruta internacional sobre el océano para los próximos cinco años y abordará toda la gama de desafíos del Decenio del Océano, incluidas cuestiones críticas como el cambio climático y las alteraciones de la biodiversidad marina, los peligros naturales, la contaminación y la seguridad alimentaria. También sentará las bases para reforzar la gestión sostenible del océano, impulsar la innovación basada en la ciencia y hacer crecer la economía azul, de lo global a lo local, sin dejar a nadie atrás.
“Ciudades con el Océano”: una nueva iniciativa para movilizar a ciudades costeras y puertos
En la conferencia, la UNESCO y 13 ciudades anunciaron la creación de la plataforma “Ciudades con el Océano”, una nueva alianza entre la Organización y las ciudades costeras y puertos que complementa la labor ya iniciada entre la UNESCO y sus 194 Estados Miembros.
El 75 % de las megaciudades del mundo están ubicadas en zonas costeras, por lo que su población es una de las más afectadas por los peligros oceánicos naturales y de origen humano —como los tsunamis, la contaminación oceánica y los efectos de las alteraciones climáticas—, aunque también son las primeras en responder y las mejor situadas para tomar decisiones a nivel local que combatan estos problemas.
La UNESCO apoyará a estas ciudades mediante el desarrollo de programas adaptados a sus necesidades, como la mejora del Programa de Reconocimiento Tsunami Ready de la UNESCO, la formación de urbanistas para anticipar los riesgos de la erosión costera o la recogida de datos científicos esenciales para las herramientas desarrolladas por la UNESCO, como el Sistema Mundial de Observación del Océano.
El próximo año, un primer simposio internacional reunirá a esta red en Qingdao, una de las mayores ciudades costeras de China. Esta iniciativa también se pondrá de relieve en Niza, como parte de los debates de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Océano, en junio de 2025.
Un nuevo centro del Decenio del Océano dedicado a la economía azul
Durante su reunión con Audrey Azoulay el miércoles por la mañana, el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, presentó la candidatura de la ciudad para acoger un nuevo centro colaborador del Decenio del Océano, que centre su actividad en el desarrollo de una economía azul sostenible.
El Centro se basará en las inversiones y actividades ya en marcha en Barcelona para promover la innovación y la tecnología vinculadas a una economía azul sostenible. Este sector ya representa el 4,3 % del PIB y el 1,4 % del empleo de la ciudad. La UNESCO realizará un estudio de viabilidad antes de septiembre de 2024, con vistas a abrir el centro antes de finales de año.
Desde 2021, ya se han creado 12 centros colaboradores auspiciados por la UNESCO, que permiten coordinar las acciones de investigación y protección que establece el Decenio del Océano.
Comprender, educar y proteger
La prioridad de la UNESCO es el progreso del conocimiento científico. Gracias al Decenio, ya se han generado miles de datos y conocimientos sobre cuestiones tan diversas como la acidificación y la oxigenación de los océanos, el aumento del nivel del mar, la biodiversidad o la batimetría. Junto a la Organización Hidrográfica Internacional, la UNESCO ya ha cartografiado el 25 % del fondo oceánico en alta resolución, frente al 6 % en 2017. También ha avanzado en la cartografía de las especies oceánicas, a través de su Sistema de Información sobre Biodiversidad Oceánica, recopilando 126 millones de observaciones de más de 180 000 especies.
Aunque en 2021 menos de la mitad de los currículos escolares mencionaba la protección del océano, la UNESCO apoya actualmente a 100 de sus Estados Miembros para que añadan la educación ambiental y oceánica a sus planes de estudio, y replanteen en consecuencia la formación del profesorado. Paralelamente, la UNESCO ha impartido formación en educación oceánica a unas 200 000 personas, tanto jóvenes como adultos. La Organización dirige, junto a Prada, un programa educativo mundial sobre el océano en el que participarán este año más de 34 000 estudiantes de 56 países.
A través de sus programas y redes mundiales, la UNESCO también protege los ecosistemas. La Organización ha inscrito 240 Reservas de la Biosfera Insulares y Costeras en 82 países, así como 50 sitios del Patrimonio Mundial Marino en 37 países, protegiendo el 21 % de los ecosistemas de carbono azul del mundo, concretamente los bosques de algas, los manglares y las praderas salinas que absorben carbono.