Durante décadas, Haití ha estado sumido en la violencia y la inestabilidad política. Mientras muchos haitianos tratan de huir para encontrar una vida mejor, el padre Germain Clerveau, responsable del Servicio Jesuita a Migrantes en Haití, trabaja para que se respete la dignidad humana de los desplazados.
El Servicio Jesuita a Migrantes en Haití existe desde hace más de veinte años. En junio de 2023, el padre Germain Clerveau asumió la dirección y, junto con varios voluntarios, trabaja para acompañar, servir y defender los derechos y la dignidad de los migrantes y desplazados.
"Esta responsabilidad forma parte de la misión social de la Compañía de Jesús, que es la de la Iglesia universal", asegura.
La tarea del Padre Clerveau no es pequeña: según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), más de 700.000 personas, más de la mitad de ellas niños, están actualmente desplazadas en Haití. La pobreza y la violencia de las bandas, en particular, están obligando a muchos haitianos a huir de sus hogares.
Algunos se desplazan dentro del país, pero muchos otros intentan llegar al otro país de la isla, la República Dominicana.