Puerto Príncipe – La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha publicado su última evaluación de los desplazamientos internos en Haití, que refleja la gravedad de la crisis en curso.
En diciembre de 2023, más de 310.000 personas se encontraban desplazadas internamente.
De las personas actualmente desplazadas internamente en Haití, más de la mitad se vieron desplazadas en 2023, lo que ilustra el empeoramiento de la situación humanitaria y de seguridad, especialmente en la capital, Puerto Príncipe. Es preocupante que los niños representen un número elevado de los desplazados.
La evaluación utilizó la Matriz de Seguimiento de Desplazamientos (DTM) de la OIM y es un esfuerzo conjunto con la Dirección General de Protección Civil de Haití (Direction générale de la Protection civile, DGPC). El ejercicio abarcó siete de los diez departamentos haitianos (tres departamentos más en comparación con noviembre de 2022), con el objetivo de cubrir los diez departamentos para fines de 2024. Los departamentos cubiertos en este informe son Artibonite, Centre, Grand'Anse, Nippes, Ouest, Sud y Sud Est.
La violencia que afecta al área metropolitana de Puerto Príncipe es el resultado de conflictos entre bandas, extorsión, secuestros y actos delictivos más amplios. La extrema brutalidad que enfrentan los haitianos agrava las profundas desigualdades, los altos niveles de privación de las necesidades humanas básicas y un entorno de seguridad fragmentado. El 94% de los desplazados internos en Haití son originarios del departamento Oeste, y la capital es la fuente principal.
La evaluación de la OIM muestra que las mujeres, los niños y los hombres se han visto obligados a abandonar sus hogares en busca de refugio, lejos de la violencia y la destrucción. Más de la mitad de ellos, 172.300, son niños, un grupo particularmente vulnerable. Ante las emergencias, los primeros en responder suelen ser las comunidades locales; los datos muestran que fuera de la capital, las familias de acogida acogen a las personas desplazadas. Las cifras correspondientes al área metropolitana de Puerto Príncipe presentan un panorama diferente: sólo el 45% de los desplazados internos son acogidos por las comunidades de acogida, con una preocupante tendencia a la baja que demuestra el deterioro de la situación de toda la población, incluidas las familias de acogida y su capacidad de adaptación.
“La tendencia al desplazamiento forzado muestra una situación humanitaria y de seguridad en constante deterioro. Si bien los trabajadores humanitarios siguen haciendo todo lo posible para brindar asistencia y apoyo vital, la ayuda humanitaria no es la única solución. Se necesitan más inversiones en soluciones a largo plazo para fortalecer los servicios estatales en todo el país”, recordó Philippe Branchat, director de la OIM en Haití.
Haití enfrenta una crisis multidimensional. El país no solo se ve afectado regularmente por desastres naturales, como terremotos, tormentas e inundaciones, sino también por la violencia propagada por cientos de pandillas, principalmente en el área metropolitana de Puerto Príncipe, pero que también se expande en las provincias.
A pesar del deterioro de la situación de seguridad en la capital, la OIM y sus socios, autoridades y líderes locales siguen prestando asistencia donde más se necesita, contribuyendo a garantizar la protección de las personas más vulnerables en movimiento, como las mujeres jóvenes, los niños, los ancianos y las personas con discapacidad.