En el pasado mes de mayo el Comité para la Defensa de los Derechos Barriales, COPADEBA, cumplió sus 36 años de presencia y trabajo como organización en distintos barrios urbano- marginales de Santo Domingo.

COPADEBA es una organización formada por moradores de barrios urbano-marginales de Santo Domingo que se unen para enfrentar a finales de los años 70’ las amenazas de desalojo que pesaban sobre los barrios: Gualey, Guachupita, Los Guandules, 27 de Febrero, Simón Bolívar, Capotillo, Espaillat, Las Cañitas y 24 de Abril. En estos barrios la Familia Vicini reclamaba su propiedad ante el gobierno.

La lucha por el derecho a la tierra y a la ciudad fue la causa principal que movilizó a las personas de estos barrios a organizarse. Una lucha que en principio fue hacia un sector privado-empresarial y luego hacia el gobierno de turno, específicamente el presidido por el PRSC en la figura de Joaquín Balaguer a finales de los 80’.

En estos barrios existían procesos organizativos generados por las Comunidades Eclesiales de Base de las distintas parroquias de los barrios con procesos de educación popular y formación de liderazgo juvenil y femenino.

COPADEBA ha logrado mantenerse en el tiempo rompiendo con la historia de desintegración, división y desaparición de muchas organizaciones barriales del país que en determinadas coyunturas dejaron huellas.

La permanencia de COPADEBA en el tiempo tiene que ver con su historia y con su naturaleza territorial y participativa. En la década de los 80 y principios de los 90’ COPADEBA logra una gran presencia en la lucha contra los desalojos que desarrolla el gobierno de Joaquín Balaguer, en esa lucha COPADEBA articula la protesta con la propuesta. En ese proceso articula equipos técnicos de profesionales de distintas áreas que junto a moradores barriales generan una visión y practica distinta de la lucha barrial, que se plasma en la formación de una institución técnica no-gubernamental, Ciudad Alternativa.

En mi caso COPADEBA fue una escuela. Formé parte de la organización desde 1987 a 1992 en una práctica de militancia social. A través de COPADEBA me vinculé a la realidad de los barrios urbano-marginales y a la construcción de formas de participación comunitaria con una visión de desarrollo y construcción de poder local.

La celebración de los 36 años de COPADEBA representa el reconocimiento de que los barrios urbano-marginales tienen en su interior una vida invisible para los medios de comunicación. En estos barrios existen espacios de construcción de pensamiento, cultura de participación, empoderamiento, liderazgo y ejercicio ciudadano. Muchas mujeres, hombres, jóvenes, adolescentes que están construyendo sus propias alternativas de cohesión social y capital social.