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Cultura y sociedad | Por Redacción Espacinsular

El recién nombrado enviado especial de la ONU para la lucha contra la islamofobia explica el compromiso internacional de hacer frente a la discriminación y la hostilidad contra los musulmanes, una de las mayores comunidades del planeta, que cuenta con 2500 millones de personas. 

El reciente nombramiento de un enviado especial de la ONU para la lucha contra la islamofobia refleja el compromiso internacional de hacer frente a la discriminación y la hostilidad contra los musulmanes, según ha declarado Miguel Ángel Moratinos, la primera persona en ocupar este cargo.

“Todo el mundo comprendió que había que hacer algo para erradicar y eliminar este sentimiento de intolerancia y falta de aceptación de estas personas”, declaró Moratinos en una entrevista* concedida a Noticias ONU.

Ante el aumento de la islamofobia, la Asamblea General de la ONU adoptó en marzo de 2024 una resolución que condenaba la violencia antimusulmana.

Actuar contra la intolerancia

En ella se pedía a los países que adoptaran todas las medidas necesarias, incluidas medidas legislativas y políticas, para combatir la intolerancia religiosa, y que prohibieran por ley la incitación a la violencia contra las personas por motivos de su religión o sus creencias.

La resolución también pedía al Secretario General que nombrara un enviado especial para la lucha contra la islamofobia.

Moratinos asumió el cargo este mes y continuará también en su actual función de Alto Representante de la Alianza de Civilizaciones de las Naciones Unidas (UNAOC), creada hace dos décadas para promover el diálogo intercultural e interconfesional.

Reflexionó sobre la importancia del nuevo nombramiento, cómo complementa su labor de lucha contra el antisemitismo y las prioridades que tiene por delante.

Miguel Ángel Moratinos: Creo que es un momento clave para la ONU y para el compromiso de lucha contra la islamofobia. Llega en un momento en el que toda la comunidad internacional, los 193 Estados miembros de la ONU, han decidido tener esta figura para demostrar que todos están a favor de la lucha contra la islamofobia.

Eso significa combatir la discriminación, la hostilidad y la violencia contra los musulmanes que quieren vivir en paz y con dignidad.

Todos comprendieron que había que hacer algo para erradicar y eliminar este sentimiento de intolerancia y falta de aceptación de estas personas. Tienen una fe, tienen una religión, tienen una misión, y por ello deben ser respetados como cualquier otro ser humano.