En sus 171 años de historia (1844-2015), la Constitución dominicana no solo ha sido modificada en 39 ocasiones, lo que equivale a una modificación cada cuatro años,sino que fue considerada un pedazo de papel, con todo lo que implica ese considerando.

 Una Constitución es el texto legal de mayor autoridad de una nación, llamado también Carta Magna, Ley de Leyes y Carta Fundamental. La Constitución es la que establece y rige un Estado de derecho, delimita el alcancede cada poder del Estado y regula sucoexistencia, al tiempo que reconoce, protege y garantiza los derechos de la ciudadanía y establece sus deberes.

En 1854,apenastranscurrida una década de la promulgación de la Carta Magna,siendo presidente Pedro Santana, le hicieron no una sino dos modificaciones. En 1858, también siendo presidente Santana, hubo otra modificación.

Buenaventura Báez fue responsable de modificaciones en los años1865, 1866, 1872, 1876 y 1877; Ignacio María González, en 1874, 1875 y 1878; Gregorio Luperón, en 1879, yFernando Arturo de Meriño,  en 1881.

Ulises Heureaux la modificó en 1887 y1896; Ramón Cáceres en 1907 y1908; Horacio Vásquez en los años 1924, 1927 y 1929 (este último año dos veces).

Durante la tiranía de Rafael Trujillo Molina(de 1930 a 1961) éste propició siete reformas a la Constitución.

Tras este oscuro período de la historia dominicana, ocurrieron modificaciones en 1961, 1962 (Rafael F. Bonnelly), 1963 (Juan Bosch), 1965 (Héctor García Godoy), 1966 y 1994  (Joaquín Balaguer), 2002 (Hipólito Mejía) y 2010 (Leonel Fernández).Ahora se habla de modificar nuevamente la Carta Magna.

Esta larga lista de modificaciones devela una triste historia para la carta fundacional de un pueblo.Es como si esosactores ratificaran que la Constitución es un simple pedazo de papel.

Ironías de un destino construido.