El consultor económico del departamento de Estudios
del Banco Central, Odalis Marte, abogó aquí por el fortalecimiento de
las capacidades nacionales en el tema de tecnologías verdes, lo que
contribuirá a que República Dominicana pueda alcanzar el objetivo de
reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 25% al año
2030, como lo estipula la Estrategia Nacional de Desarrollo (END -
2030).
El funcionario dijo que esa meta de reducción de emisiones fue
presentada por el país en su Contribución Prevista y Determinada a
Nivel Nacional (INDC) ante la Convención Marco de Naciones Unidas
sobre Cambio Climático, y forma parte del compromiso-país para el
acuerdo global de reducción de emisiones que se procura alcanzar en la
Vigésimo-primera Conferencia de las Partes (COP21).
Marte hizo el planteamiento al participar en el panel “Lecciones
aprendidas desde los casos de cooperación en la transferencia de
tecnología climática a países en desarrollo”, organizado por el Centro
de Tecnología Verde de Corea (GTC-K) en el marco de la COP21, que
inició el 30 de noviembre en la capital francesa.
El panel fue moderado por el presidente del GTC-K, Changmo Sung, y
estuvo compuesto, además de Marte, por Karma Tshering, de Bután;
Jiwhan Ahh, del Instituto Coreano de Geociencia y Recursos Minerales;
Youngsung Cho, de la Universidad de Corea del Sur; Hyung-ju Kim, de
GTC-K, y Miles Austin, director del Instituto Global para el
Crecimiento Verde (GGGI).
Tuvo como objetivo principal compartir lecciones aprendidas en la
ejecución de acciones para incrementar el acceso al financiamiento de
tecnologías verdes y en cómo facilitar estas transferencias a países
en vías de desarrollo bajo el nuevo acuerdo climático post 2020.
Durante la jornada se resaltaron las barreras que enfrenta la
transferencia de tecnología climática hacia países en vías de
desarrollo, las cuales varían según las características de las
tecnologías, los países receptores, el nivel de comercialización, las
inversiones y el mercado.
También se argumentó sobre la importancia de que los países en
desarrollo reciban apoyo financiero para la transferencia de
tecnología, como una manera de impulsarlas tanto en el sector público
como en el privado. Se informó, además, que la difusión de este tipo
de tecnologías limpias requiere esfuerzos dirigidos a apoyar a
emprendedores y a facilitar el acceso para iniciar y determinar el
riesgo en una etapa temprana.
El GTC-K es un centro de pensamiento que coordina y apoya las
políticas nacionales de tecnologías de investigación y desarrollo
verde en colaboración con los ministerios y agencias de Corea.
A mediados de año, este centro firmó un acuerdo de cooperación con el
Consejo Nacional para el Cambio Climático y el Mecanismo de Desarrollo
Limpio (CNCCMDL) para realizar en el país un proyecto piloto de
generación de energía a partir de residuos (waste-to-energy), con la
participación del Ministerio de Energía y Minas, la Corporación
Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales, la Comisión Nacional de
Energía y la municipalidad de Santiago.