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En ocasión del Día Internacional del Migrante, celebrado a escala mundial el 18 de diciembre, la Coordinadora Nacional por la Justicia Migratoria y los Derechos Humanos de Inmigrantes hace un reconocimiento especial a los medios de comunicación, tradicionales y alternativos, que han estado dando cobertura al desarrollo del PNRE. 

 Estamos dirigiendo, de manera especial, nuestro mensaje de apoyo a las y los periodistas Edith Febles, Marino Zapete, Huchi Lora, Amelia Deschamps y Juan Bolívar Díaz, por su defensa incansable de los derechos de todas las personas, destacando las minorías étnicas, sociales y económicas. También enviamos una mención de honor al abogado Manuel María Mercedes y la sindicalista Eulogia (Gina) Familia por sus constantes vocerías a favor de una política migratoria justa, clara y transparente en República Dominicana.

Por otro lado, tenemos que reconocer que ha habido avance en la cuestión migratoria en el país, sobre todo por la reciente resolución del CNSS, de fecha 12 de noviembre del 2015, que incluye en el sistema de seguridad social a los/as trabajadores/as inmigrantes con estatus migratorio regular, miles de personas que con su esfuerzo, dedicación y sudor crean riqueza en la República Dominicana en la construcción, el comercio, la agricultura y otros rubros de la economía.

No obstante, siguen múltiples dificultades y retos en varias decisiones relativas al ordenamiento migratorio en el país:

Se necesita una evaluación del PNRE, al menos para presentar al país y la comunidad inmigrante una información precisa y clara sobre cuantas personas lograron un estatus migratorio regular, permanente o temporal, de las 288,466 personas inscritas en dicho plan. Es necesario saber cuántos han recibido un carnet que lo certifique, que se nos informe oportunamente los próximos pasos a seguir.

Además de esa política pública, también nos preocupamos por las pésimas condiciones de vida en múltiples bateyes en el país.

A los trabajadores de la caña les siguen pagando con “vales” para pagar deudas en el colmado del batey. Además, apenas 2,724 de los trabajadores cañeros (según datos del gobierno) de un estimado de 50 mil han podido lograr una residencia dentro del PNRE, y siguen reclamando su derecho a una pensión del Estado para poder sobrevivir con sus familiares.

La población inmigrante en República Dominicana, proveniente de más de 60 países, trata de vivir con dignidad y en base al esfuerzo y el trabajo. Al igual que los casi 2 millones de dominicanos, que por razones muy similares han buscado en otras latitudes otra vida mejor, aportando más de 4,000 millones de dólares anuales en remesas a la economía dominicana. 

Roudy Joseph

 

Portavoz de Justicia Migratoria