A pesar de la alta cifra registrada por la Organización Mundial de la Migración (OIM), las muertes de migrantes bajaron en un 35.9% en comparación con el 2017.
El mar Mediterráneo es la ruta más peligrosa para los migrantes en el mundo. Por lo menos 2.242 personas, cerca del 50% de las muertes del total que registró la Organización Mundial de la Migración, ocurrieron en esa zona. Pero no es la única.
De esas más de 2.000 personas, 1282 salieron de las costas libias y de Túnez con destino al sur de Italia, mientras que 739 salieron de Marruecos o Argelia hacia las costas de España como meta. 167 murieron en el Mediterráneo oriental.
La frontera de Estados Unidos y México y el Norte de África también fueron pasos mortales para los migrantes. A pesar del esfuerzo de registro, las cifras pueden ser mayores ya que no es fácil el acceso a la información en muchas de las zonas remotas o de conflicto.
La región de origen de muchos de los muertos se desconoce, pero entre los que sí pudieron ser identificados, son las personas que huyen de la pobreza y la violencia de África los que más mueren en su intento por emigrar.
La mayoría de migrantes mueren ahogados, pero también en accidentes de tránsito o infartos. En el paso del África Subsahariana en Asia y en los desiertos de Norte América y en las estepas de Asía se registraron más de un centenar de muertos por deshidratación o hambre.
La frontera donde más se registran incidentes es Libia. Un país donde según un reciente informe de la ONU se somete a “inimaginables horrores” a los migrantes. 29.000 migrantes fueron interceptados por la Guardia Costera Libia y llevados a 11 centros de detención donde se registraron tortura y violaciones cometidas por los guardias.
En la frontera entre México y Estados Unidos las cifras no varían significativamente, sin embargo, hubo un aumento de 348 casos a 376 en el 2018. Según el Proyecto de Migrantes Desaparecidos la mayoría murieron en la parte oriental de la frontera y América del Sur, donde la mayoría de migrantes vienen de Venezuela, registró una cifra de 27 fallecidos.