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Meteorología y Ruta de los huracanes | Fuente Externa

La Organización Mundial Meteorológica advirtió el 1 de marzo que el fenómeno del Niño reaparecería debido al debilitamiento de la Niña. Eso significa que algunos de sus efectos como la sequía, menos lluvias, hay que tomarlo en cuenta.

   Según el último boletín El Niño/La Niña Hoy de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), después de tres años consecutivos en los que un episodio inusualmente pertinaz y prolongado de La Niña ha influido en las pautas de temperatura y precipitación en distintas partes del mundo, es posible que en los próximos meses se instaure un episodio de El Niño que ejercería un efecto de calentamiento.

Sin embargo, aunque la reinstauración de un episodio de El Niño se considera probable, su reaparición estaría precedida por un período de condiciones neutras con respecto al fenómeno El Niño-Oscilación del Sur (ENOS) (probabilidad del 90 %) entre los meses de marzo y mayo. La probabilidad de que las condiciones neutras en cuanto al ENOS persistan más allá de mayo disminuye ligeramente, pero sigue siendo alta (80 % entre abril y junio y 60 % entre mayo y julio), según las predicciones de los modelos y las evaluaciones de los expertos que han participado en la elaboración del boletín.

El Niño podría reaparecerLa probabilidad de instauración de un episodio de El Niño durante la primera mitad del año es baja (15 % entre abril y junio), pero aumenta gradualmente hasta el 35 % para el período de mayo a julio. Los pronósticos a largo plazo para los meses de junio a agosto indican una probabilidad mucho mayor (55 %) de que se forme un episodio de El Niño, aunque están sujetos a la elevada incertidumbre asociada a los pronósticos generados en esta época del año fruto de la denominada “barrera de predictibilidad de la primavera”.

“El primer episodio triple de La Niña del siglo XXI está llegando a su fin. El efecto de enfriamiento de La Niña ha frenado provisionalmente la subida de las temperaturas mundiales, a pesar de que el período de los últimos ocho años ha sido el más cálido del que se tiene constancia”, declaró el Secretario General de la OMM, profesor Petteri Taalas.

“Si ahora entramos en una fase de El Niño, es probable que se produzca otro repunte de las temperaturas a escala mundial”, afirmó el profesor Taalas.

El año 2016 es el más cálido registrado hasta la fecha porque en ese momento concurrieron un episodio de El Niño y el cambio climático. Hay una probabilidad del 93 % de que al menos uno de los años que quedan hasta 2026 se convierta en el más cálido jamás observado, y una probabilidad del 50 % de que la temperatura mundial supere transitoriamente en 1,5 °C los niveles preindustriales, según un estudio realizado el año pasado por la Oficina Meteorológica del Reino Unido, que es el Centro Principal de la OMM de Predicción Climática Anual a Decenal.

El actual episodio de La Niña comenzó en septiembre de 2020, y cesó brevemente en el verano boreal de 2021. La Niña es un fenómeno que produce un enfriamiento a gran escala de la temperatura de la superficie del océano en las partes central y oriental del Pacífico ecuatorial, además de otros cambios en la circulación atmosférica tropical. Sus efectos en el tiempo y el clima de las regiones afectadas suelen ser opuestos a los del fenómeno El Niño.

La Niña se ha asociado a la pertinaz sequía que experimentan la región del Cuerno de África y amplias zonas de América del Sur, así como también a precipitaciones superiores a la media en el sudeste asiático y Australasia.

Una nueva proyección climática de alcance regional publicada el 22 de febrero advertía de que la situación catastrófica que vive el Cuerno de África empeoraría aún más porque se espera que la próxima temporada de lluvias de marzo a mayo sea escasa.

A pesar de que El Niño y La Niña son fenómenos de origen natural, ahora se producen en un contexto de cambio climático debido a la actividad humana, que está aumentando las temperaturas mundiales y alterando las pautas de precipitación estacional, además de hacer que nuestro tiempo sea más extremo.

Proyección del clima estacional mundial

El Niño y La Niña son importantes condicionantes del sistema climático de la Tierra, pero no son los únicos. Además del boletín El Niño/La Niña Hoy, que la OMM publica desde hace tiempo, la Organización también publica ahora boletines periódicos sobre el clima estacional mundial, en los que se tienen en cuenta las influencias de los demás condicionantes climáticos importantes, como la oscilación del Atlántico Norte, la oscilación del Ártico y el dipolo del océano Índico.

Los boletines sobre el clima estacional mundial y el boletín El Niño/La Niña Hoy que elabora la OMM se basan en los pronósticos de los Centros Mundiales de Producción de Predicciones a Largo Plazo de la OMM, y los datos que contienen están a disposición de los gobiernos, las Naciones Unidas, las instancias decisorias y otras partes interesadas de sectores sensibles al clima para que puedan adoptar medidas de preparación y proteger vidas y medios de subsistencia.

Según las previsiones, en las zonas central y oriental del Pacífico ecuatorial volverán a imponerse unas condiciones prácticamente normales con respecto al ENOS, mientras que para las demás regiones oceánicas se prevén, en términos generales, temperaturas de la superficie del mar superiores a la media. Ello corrobora la predicción generalizada de que, en las zonas terrestres, las temperaturas serán superiores a las normales, según el boletín sobre el clima estacional mundial.

Aunque el episodio de La Niña está llegando a su fin, es probable que veamos consecuencias latentes durante algún tiempo y, por tanto, todavía pueden persistir algunos de los efectos convencionales de La Niña desde el punto de vista de la precipitación. Los pertinaces efectos del episodio de La Niña que se ha mantenido durante varios años se deben, en esencia, a su prolongada duración y a la anomalía continua en la circulación atmosférica, y son distintos de los causados por un episodio único de La Niña.

Probabilistic forecasts of surface air temperature for March – May 2023

Predicciones probabilísticas de la temperatura del aire en superficie para los meses de marzo a mayo de 2023. El período de referencia es el comprendido entre 1993 y 2009. La figura ha sido generada por el Centro Principal de la OMM de Predicción a Largo Plazo mediante Conjuntos Multimodelos.

Probabilistic forecasts of precipitation for the season for March – May 2023

Predicciones probabilísticas de la precipitación para los meses de marzo a mayo de 2023. El período de referencia es el comprendido entre 1993 y 2009. La figura ha sido generada por el Centro Principal de la OMM de Predicción a Largo Plazo mediante Conjuntos Multimodelos.