Nosotros y nosotras, a la luz de la Llama Verde del Fin de la Impunidad que ha recorrido de extremo a extremo los caminos de esta Patria fundada por Juan Pablo Duarte y Los Trinitarios, proclamamos al país y al mundo que, como la inmensa mayoría del pueblo dominicano, tenemos sed de Justicia.
Tenemos sed de Justicia, y somos conscientes de las maniobras y los intentos de mareo mediático realizados por el presidente Danilo Medina, su procurador Jean Alain Rodríguez y la cúpula del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) para burlarse de la ciudadanía e intentar garantizar la impunidad a los principales responsables de los sobornos, sobrevaluaciones y financiamientos ilegales del caso Odebrecht.
Tenemos sed de Justicia, y advertimos las graves consecuencias que podría enfrentar la sociedad dominicana por el silencio cómplice del presidente Medina, elegido en el 2012 y el 2016 gracias a la asesoría y relación comercial con el delicuente internacional Joao Santana, responsable del financiamiento ilegal de campañas políticas por parte de Odebrecht en diferentes países el continente.
Tenemos se de Justicia, y conocemos las maniobras de personalidades del sector empresarial, religioso y político para impedir una investigación con responsabilidades penales en el caso de la licitación de las plantas a carbón de Punta Catalina.
Tenemos sed de Justicia, y con una llama verde encendida en nuestros corazones, advertimos a las élites empresariales, religiosas, políticas y sociales de las terribles consecuencias sociales, institucionales y económicas que podría enfrentar nuestro país si la dirigencia nacional mantiene una actitud cómplice frente al mayor escándalo de corrupción de nuestra Historia.
Tenemos sed de Justicia, y ante los intentos de la delincuencia política de desacreditar y silenciar nuestra legítima aspiración, nos aferramos al ardiente compromiso de mantener la movilización social constante en las calles hasta alcanzar el fin de la impunidad, porque creemos que la Justicia es la única garantía para mantener la paz en las actuales circunstancias de República Dominicana.
Tenemos sed de Justicia, y por eso vamos rumbo a la Marcha del Cibao este domingo 26 de marzo y , en abril, a la Asamblea Verde Nacional, a escribir nuevas páginas de Historia Patria y Soberanía Popular.
¡Cárcel a los corruptos, recuperación de lo robado y cancelación de los contratos!