La guerra en Ucrania, las alzas de las tasas de interés y la amenaza de una recesión económica generan incertidumbre. La conferencia sobre comercio y desarrollo vaticina que, en el mejor de los casos, los flujos de inversión se mantendrían sin cambio. En 2021 ascendieron a 1,6 billones de dólares.
La inversión extranjera directa se recuperó el año pasado para alcanzar los niveles previos a la pandemia, llegando a 1,6 billones de dólares a nivel global, informó este jueves la Conferencia de la ONU sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD).
Pero la tendencia no se mantendrá en 2022, matizó la dependencia, que proyecta una reducción de esos flujos o, en el mejor escenario previsible, un estancamiento en el nivel actual.
En su informe sobre inversiones en el mundo, la UNCTAD señala que para hacer frente a un entorno de incertidumbre y aversión al riesgo, los países en desarrollo deben obtener una ayuda significativa de la comunidad internacional.
Hace falta invertir en los ODS
Rebeca Grynspan, secretaria general de la Conferencia, subrayó la necesidad de que se invierta en capacidad productiva, en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y en la mitigación y adaptación al cambio climático.
También hizo hincapié en la falta de inversión en sectores relevantes para los Objetivos, sobre todo en alimentación, agricultura, salud y educación, donde los flujos siguen a la baja.
“Las tendencias actuales de inversión en estas áreas no son positivas”, alertó y agregó que es importante actuar ahora. “Aunque los países enfrentan problemas inmediatos muy alarmantes derivados de la crisis del costo de vida, es importante que podamos invertir a largo plazo”, subrayó Grynspan.
En este sentido, el informe asevera que el financiamiento de proyectos internacionales es cada vez más importante para los ODS y la inversión en la acción climática.
Los números
Según los datos de la UNCTAD, la inversión extranjera directa aumentó un 64% en 2021 con respecto al año anterior gracias a una serie de fusiones y adquisiciones y al crecimiento rápido del financiamiento de proyectos internacionales.
Las cifras desagregadas muestran que la recuperación benefició en alguna medida a todas las regiones, aunque cerca del 75% de los flujos de inversión se concentraron en las economías desarrolladas, donde aumentaron un 134%, con las empresas multinacionales registrando ganancias récord.
En tanto, los flujos hacia las economías en desarrollo subieron un 30% a 837.000 millones de dólares, el nivel más alto jamás registrado, en gran parte debido a la fortaleza en Asia, una recuperación parcial en América Latina y el Caribe y un repunte en África. La participación de los países en desarrollo en los flujos mundiales se mantuvo un poco por encima del 50%.
La UNCTAD indicó que Estados Unidos, China, Hong Kong (China), Singapur, Canadá, Brasil, India, Sudáfrica, Rusia y México fueron las economías que recibieron más flujos de inversión.