La opinión es de la Representante del Secretario General de las Naciones Unidas, durante el Consejo de Seguridad de hoy donde se evaluó la actual crisis haitiana
Comunicado íntegro de la presentación de María Isabel Salvador
Monsieur le Président, distinguidos miembros del Consejo, excelencias, señoras y señores:
Me presento ante ustedes con la esperanza de que se produzcan signos de progreso en el frente político, a pesar de los graves reveses en el ámbito de la seguridad.
El 11 de noviembre, bandas armadas atacaron aviones comerciales cerca del aeropuerto internacional de Puerto Príncipe, lo que obligó a su cierre y a la suspensión de todos los vuelos. Al menos tres aviones fueron alcanzados, hiriendo a una azafata en un caso. La consiguiente prohibición de la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos a las aeronaves registradas en Estados Unidos exacerbó el aislamiento de Puerto Príncipe, y al menos una importante aerolínea ha anunciado que no regresará a Haití en el futuro previsible. Esta es la segunda vez en menos de un año que se suspenden las operaciones comerciales en el aeropuerto, dejando a la población de la capital cada vez más aislada del resto del país y del mundo.
Poco después, las pandillas lanzaron ataques coordinados y simultáneos en toda la capital, incluso en zonas que antes no habían sido afectadas por este tipo de violencia. Estos ataques, destinados a desestabilizar las instituciones del Estado, desencadenaron respuestas violentas de los grupos de autodefensa, con residentes armados con machetes y armas de fuego. Este ciclo de violencia, en Puerto Príncipe, provocó al menos 220 muertes y desplazó a casi 41.000 personas.
En diciembre, bandas armadas cometieron homicidios masivos en Wharf Jérémie, en la comuna de Cité Soleil, que causaron 207 muertes, en su mayoría ancianos. Mientras tanto, el departamento de Artibonite experimentó una fuerte escalada de violencia, con ataques de represalia entre pandillas y grupos de autodefensa que causaron 114 muertes. El 24 de diciembre, el Hospital de la Universidad Estatal de Puerto Príncipe fue atacado antes de su ceremonia de reapertura, lo que provocó la muerte de un agente de policía y dos periodistas.
El 18 de enero, otros 217 agentes de policía kenianos (incluido un equipo de avanzada de 5 mujeres) fueron desplegados en Haití. Además, también han llegado 150 guatemaltecos y un equipo de avanzada de ocho soldados salvadoreños.
La Policía Nacional de Haití (PNH), con el apoyo de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS) y, en algunos casos, de las Fuerzas Armadas de Haití, se ha esforzado por responder a este aumento de la violencia. La mejora de la coordinación entre el MSS y las fuerzas de seguridad nacionales ha permitido mejorar la planificación y ejecución de las operaciones contra las pandillas. El reciente nombramiento de un Secretario de Estado de Seguridad Pública es un paso positivo, que indica un mayor enfoque en abordar los desafíos de seguridad de Haití.
El 10 de enero se alcanzó un hito importante, cuando 739 nuevos reclutas, entre ellos 213 mujeres, se graduaron de la Academia Nacional de Policía. La esperanza y el orgullo reflejados en estos jóvenes reclutas y sus familias son un recordatorio muy necesario de resiliencia y determinación.
Sin embargo, los desafíos a los que se enfrenta la PNH siguen siendo inmensos, con altas tasas de deserción, insuficiente capacitación especializada y falta de equipo. Es fundamental aumentar la asistencia internacional.
Aprovecho esta oportunidad para dar las gracias a los Estados Miembros por sus contribuciones en materia de personal y, a través del Fondo Fiduciario para el MSS, a este honorable Consejo por su firme apoyo y, una vez más, felicitar a Kenya por su liderazgo. Insto a los Estados Miembros a que aporten contribuciones adicionales para garantizar el éxito de este esfuerzo multinacional.
Excelencias
El empeoramiento de la crisis de seguridad ha repercutido significativamente en las operaciones de las Naciones Unidas. En respuesta a la suspensión de los vuelos a Puerto Príncipe y a la violencia generalizada, la ONU decidió reducir temporalmente su presencia en la capital, al tiempo que continuaba brindando asistencia vital. Este mecanismo ha permitido a la BINUH, con un equipo mínimo, y a los organismos de las Naciones Unidas seguir cumpliendo sus mandatos mediante esfuerzos híbridos, combinando el personal nacional y la presencia internacional crítica en Puerto Príncipe con el trabajo a distancia.
Las Naciones Unidas mantienen su compromiso de aumentar su presencia tan pronto como las condiciones de seguridad lo permitan, supervisando continuamente el entorno de seguridad para garantizar la seguridad del personal y prestando asistencia a quienes la necesiten.
Señor Presidente, Excelencias:
El panorama político de Haití ha experimentado acontecimientos positivos desde mi última declaración ante el Consejo. El nombramiento de Alix Didier Fils-Aimé como primer ministro el 11 de noviembre ha mejorado la colaboración entre el Gobierno y el Consejo Presidencial de Transición. Esta cooperación ha permitido avanzar en cuestiones clave de gobernanza.
Una mejor coordinación entre el Consejo Presidencial de Transición y el gobierno actual ha logrado refinar y enfocar las "prioridades de prioridades" de la transición: "seguridad, elecciones y apaciguamiento social", y ha ayudado a avanzar en algunas decisiones clave de gobernabilidad que anteriormente estaban pendientes. Felicito el nombramiento de los dos miembros restantes del Consejo Electoral Provisional. Cuatro de los nueve miembros son ahora mujeres, un paso importante hacia una mayor inclusión de género en el proceso electoral.
También acojo con beneplácito el nombramiento de los Ministros Delegados para Asuntos Electorales y Constitucionales y para Asuntos Solidarios y Humanitarios, que espero aumente la visibilidad de estas dos carteras clave.
En respuesta a una solicitud del gobierno haitiano, las Naciones Unidas desplegaron una Misión de Evaluación de Necesidades Electorales en noviembre. Las recomendaciones de la misión, aprobadas por el Punto Focal de las Naciones Unidas para la Asistencia Electoral, incluyen apoyo específico a los procesos constitucionales y electorales.
Mientras tanto, la Conferencia Nacional sobre la Reforma Constitucional continúa su labor. En noviembre y diciembre, el Grupo de Trabajo sobre la Revisión de la Constitución colaboró con diversos sectores de la sociedad para recabar perspectivas sobre los principales principios constitucionales. Esta semana comenzarán consultas más amplias con la diáspora haitiana y en todo el país para garantizar la inclusión. El referéndum constitucional y las elecciones generales siguen previstas para este año, lo que exige medidas de aumento de la seguridad, un compromiso sostenido y avances oportunos.
La creación del Consejo de Seguridad Nacional es otro logro notable. Este mecanismo de planificación y coordinación tiene el potencial de fortalecer significativamente los esfuerzos de seguridad de Haití. Insto a las autoridades a que pongan plenamente en funcionamiento esta estructura para maximizar su impacto.
Señor Presidente, Excelencias
Si bien hay progresos en el frente político y hay motivos para tener esperanzas tímidas, el marco de transición sigue siendo frágil. La creciente fragmentación de los sectores políticos representados en el Consejo Presidencial de Transición, junto con las persistentes críticas a este Consejo, complica el proceso. Las graves acusaciones de corrupción contra tres miembros del Consejo han exacerbado las tensiones y puesto en tela de juicio la legitimidad de sus acciones.
Recientemente, algunos agentes políticos han solicitado asistencia al Grupo de Personas Eminentes de la CARICOM para facilitar un diálogo nacional. Una carta dirigida a la CARICOM por actores de tres grupos políticos que forman parte del Consejo Presidencial de Transición, propone diferentes opciones para resolver las controversias en torno a este tema. Sin embargo, la mención de una coalición de pandillas en la carta provocó fuertes críticas, destacando la oposición generalizada a cualquier interacción con las pandillas criminales.
Estos acontecimientos demuestran que cualquier intento de legitimar las bandas armadas es rechazado por la mayoría de los actores haitianos y por el público en general.
Señor Presidente:
La crisis humanitaria en Haití ha alcanzado niveles alarmantes. Más de 6 millones de personas, casi la mitad de la población, necesitan asistencia humanitaria, de los cuales 3,9 millones están destinadas a la ayuda. El número de desplazados internos se ha triplicado a más de 1 millón, de los cuales más de la mitad son niños. Los sitios de desplazamiento están superpoblados y carecen de servicios esenciales como agua potable, saneamiento y educación.
La inseguridad alimentaria afecta al 48% de la población, con casi 2 millones de personas en condiciones de emergencia (fase 4 de la CIF) y 6.000 en condiciones catastróficas (fase 5 de la CIF). A pesar de estos desafíos, los socios humanitarios llevaron a cabo 700 misiones de la ONU en el cuarto trimestre, incluidas 500 directamente relacionadas con la asistencia vital.
El Plan de Respuesta Humanitaria 2025 requiere 908 millones de dólares, y hago un llamamiento a los donantes para que contribuyan generosamente a aliviar el sufrimiento y apoyar la recuperación.
Excelencias
En este momento crucial, Haití necesita su apoyo continuo más que nunca. Para organizar un proceso de revisión constitucional y elecciones creíbles, participativas e inclusivas en este contexto de crisis, los actores haitianos deben superar sus diferencias y colaborar. Una solución duradera requiere progresos simultáneos en los frentes político y de seguridad, respaldados por una solidaridad internacional constante.
La BINUH seguirá ofreciendo sus buenos oficios y su apoyo estratégico para ayudar a Haití a hacer frente a estos complejos desafíos.
Merci.
Traducción libre
Original
Monsieur le Président, Distinguished Members of the Council, Excellencies, Ladies and Gentlemen,
I come before you hopeful for the signs of progress in the political front, despite serious setbacks in the security one.
On 11 November, armed gangs targeted commercial aircraft near the Port-au-Prince international airport, forcing its closure and the suspension of all flights. At least three aircraft were hit, injuring a flight attendant in one instance. The resulting US Federal Aviation Administration ban on US-registered aircraft exacerbated Port-au-Prince’s isolation, and at least one major airline has announced it will not return to Haiti for the foreseeable future. This marks the second time in less than a year that commercial operations at the airport have been suspended, leaving the population of the capital increasingly cut off from the rest of the country and the world.
Shortly after, gangs launched coordinated and simultaneous attacks across the capital, including in areas previously untouched by such violence. These attacks, aimed at destabilizing state institutions, triggered violent responses from self-defense groups, with residents armed with machetes and firearms. This cycle of violence, in Port-au-Prince, led to at least 220 deaths and displaced nearly 41,000 people.
In December, armed gangs carried out mass killings in Wharf Jérémie, in the commune of Cité Soleil, resulting in 207 fatalities, mostly among the elderly. Meanwhile, the Artibonite Department saw a sharp escalation in violence, with retaliatory attacks between gangs and self-defense groups leading to 114 deaths. On 24 December, the Hospital of the State University in Port-au-Prince was attacked ahead of its reopening ceremony, resulting in the deaths of a police officer and two journalists.
On 18 January, an additional 217 Kenyan police officers (including an advance team of 5 women) were deployed to Haiti. In addition, 150 Guatemalans and an advance team of eight Salvadorean troops have also arrived.
The Haitian National Police (HNP), supported by the Multinational Security Support mission (MSS) and, in some cases, by the Armed Forces of Haiti, has made efforts to respond to this surge in violence. Improved coordination between the MSS and national security forces has led to better planning and execution of anti-gang operations. The recent appointment of a Secretary of State for Public Security is a positive step, signaling a stronger focus on addressing Haiti’s security challenges.
A significant milestone was reached on 10 January, when 739 new recruits, including 213 women, graduated from the National Police Academy. The hope and pride reflected in these young recruits and their families provide a much-needed reminder of resilience and determination.
However, challenges faced by the HNP remain immense, with high attrition rates, insufficient specialized training, and a lack of equipment. Enhanced international assistance is critical.
I take this opportunity to thank Member States for their contributions in personnel and through the Trust Fund for the MSS, this honorable Council for its steadfast support of it and, once again, commend Kenya for its leadership. I urge Member States to provide additional contributions to ensure the success of this multinational effort.
Excellencies,
The worsening security crisis has significantly impacted United Nations operations. In response to the suspension of flights to Port-au-Prince and widespread violence, the UN decided to temporarily reduce its footprint in the capital, while continuing to provide lifesaving assistance. This mechanism has enabled BINUH, with a skeleton team, and UN agencies to continue to deliver on their mandates through hybrid efforts, combining national staff and critical international presence in Port-au-Prince with remote work.
The UN remains committed to scaling up its presence as soon as security conditions permit, continuously monitoring the security environment to ensure the safety of personnel while delivering assistance to those in need.
Monsieur le Président, Excellences,
Le paysage politique en Haïti a connu des évolutions positives depuis ma dernière intervention devant ce Conseil. La nomination d'Alix Didier Fils-Aimé au poste de Premier ministre le 11 novembre a amélioré la collaboration entre le Gouvernement et le Conseil Présidentiel de Transition. Cette coopération a permis de faire avancer des dossiers clés en matière de gouvernance.
Une meilleure coordination entre le Conseil présidentiel de transition et le gouvernement actuel a permis d'affiner et de cibler avec succès les « priorités des priorités » de la transition : « sécurité, élections et apaisement social », et a contribué à faire avancer certaines décisions clés de gouvernance qui étaient auparavant en suspens. Je félicite la nomination des deux membres restants du Conseil électoral provisoire. Quatre des neuf membres sont désormais des femmes, une étape importante vers une plus grande inclusion du genre dans le processus électoral.
Je salue également la nomination des ministres délégués aux Affaires électorales et constitutionnelles et à la Solidarité et aux Affaires humanitaires, qui, je l'espère, renforceront la visibilité de ces deux portefeuilles clés.
In response to a request from the Haitian government, the United Nations deployed an Electoral Needs Assessment Mission in November. The mission’s recommendations, approved by the UN Focal Point for Electoral Assistance, include targeted support for constitutional and electoral processes.
Meanwhile, the National Conference on constitutional reform continues its work. In November and December, the Working Group on Constitutional Review engaged with various sectors of society to gather perspectives on key constitutional tenets. Broader consultations with the Haitian diaspora and across the country are starting this week to ensure inclusivity. The constitutional referendum and general elections remain targeted for this year, requiring security increasing measures, sustained commitment and timely progress.
The establishment of the National Security Council is another notable achievement. This planning and coordinating mechanism, has the potential to significantly strengthen Haiti’s security efforts. I encourage authorities to fully operationalize this structure to maximize its impact.
Mister President, Excellencies
While there is progress on the political front and reason to be timidly hopeful, the transition framework remains fragile. The increasing fragmentation of the political sectors represented on the Transitional Presidential Council, combined with persistent criticism of this Council, complicates the process. Serious corruption allegations targeting three members of the Council have heightened tensions and called into question the legitimacy of its actions.
Recently, some political actors have sought assistance from the CARICOM Eminent Persons Group to facilitate a national dialogue. A letter addressed to CARICOM by actors from three political groups that are part of the Presidential Transitional Council, proposes different options for resolving disputes around this issue. However, the letter's mention of a gang coalition sparked strong criticism, highlighting widespread opposition to any interaction with criminal gangs.
These developments show that any attempt to legitimize armed gangs is rejected by the majority of Haitian actors and the public in general.
Mister President,
The humanitarian crisis in Haiti has reached alarming levels. Over 6 million people - nearly half the population - require humanitarian assistance, with 3.9 million targeted for aid. The number of internally displaced persons has tripled to over 1 million, with more than half being children. Displacement sites are overcrowded and lack essential services such as clean water, sanitation, and education.
Food insecurity affects 48 per cent of the population, with nearly 2 million people in emergency conditions (IPC phase 4) and 6,000 in catastrophic conditions (IPC phase 5). Despite these challenges, humanitarian partners conducted 700 UN missions in the fourth quarter, including 500 directly related to life-saving assistance.
The 2025 Humanitarian Response Plan requires USD 908 million, and I call on donors to contribute generously to alleviate suffering and support recovery.
Excellences,
En cette période cruciale, Haïti a plus que jamais besoin de votre soutien continu. Pour organiser un processus de révision constitutionnelle et des élections crédibles, participatives et inclusives dans ce contexte de crise, les acteurs haïtiens doivent surmonter leurs différences et collaborer. Une solution durable nécessite des progrès simultanés sur les fronts politique et sécuritaire, soutenus par une solidarité internationale constante.
Le BINUH continuera à offrir ses bons offices et son soutien stratégique pour aider Haïti à relever ces défis complexes.
Merci.




