Como ya se había advertido la temporada ciclónica en el Atlántico con pronósticos pocos halagüeños para este año, debido a la presencia del fenómeno atmosférico La Niña.

 Las perspectivas para esta temporada de huracanes es que sea más activa de lo normal, es el pronóstico de la Oficina Nacional de Meteorología (ONAMET) y de las agencias meteorológicas mundiales .Las expectativas para esta temporada ciclónica son que se formen 19 tormentas tropicales nombradas, de las cuales nueve podrían alcanzar la categoría de huracán y que de estos cuatro sean de categoría tres, cuatro o cinco en la escala de Saffir Simpson.

La temporada de huracanes, que oficialmente se extiende desde el primero de junio hasta el 30 de noviembre, volverá a estar por encima del promedio y, sería el séptimo año consecutivo que así sucede, de acuerdo a expertos de Estados Unidos.

Nombres sugeridos

Los ciclones tropicales que pudieran formarse en el  océano Atlántico llevarían los siguientes nombres: Alex, Bonnie, Colin, Danielle, Earl, Fiona, Gastón, Hermine, Ian, Julia, Karl, Lisa, Martin, Nicole, Owen, Paula, Richard, Shary, Tobías, Virginie y Walter.

Pronósticos locales

La ONAMET pronosticó que para hoy se registrarán algunas precipitaciones en horas matutinas, en poblados del este y del sureste, entre los que destacó las provincias Santo Domingo, Monte Plata, San Pedro de Macorís, La Romana y el Distrito Nacional.

“En cuanto a la tarde, estas precipitaciones tomarán presencia sobre localidades del norte, noroeste y de la Cordillera Central, donde también se generarán tronadas aisladas y algunas ráfagas de viento, efectos del ciclo diurno”, agregó.

Informó que las lluvias que se registran son ocasionadas por la humedad generada por el viento del este-sureste y los efectos del calentamiento diurno.

Fenómeno La Niña

La Niña es un fenómeno climático que forma parte de un ciclo natural-global del clima conocido como El Niño-Oscilación del Sur (ENOS, El Niño-Southern Oscillation, ENSO por su acrónimo en inglés).

Este ciclo global tiene dos extremos: una fase cálida conocida como El Niño y una fase fría, precisamente conocida como La Niña.