Pese a que la Atención Primaria es considerada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como uno de los medios esenciales para ejercer el derecho ciudadano a la Salud, ésta aún no se ha podido iniciar en el país porque la Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales (SISALRIL) lleva más de siete años de retraso en la elaboración de la estrategia de implementación.

Así lo entiende la Fundación Progreso, Salud y Seguridad Social, que urgió de la SISALRIL el acatar los mandatos del Consejo Nacional de la Seguridad Seguridad Social (CNSS) para "evolucionar a un sistema que promueva la Salud de la ciudadanía".

 La fundación, organización sin fines de lucro creada recientemente para defender el derecho ciudadano a la salud y el cumplimiento pleno de la Ley de Seguridad Social, advirtió que la Atención Primaria es el mecanismo de entrada al SDSS, pero que se mantiene en un limbo porque la SISALRIL no cumple sus obligaciones.

"El CNSS ha resolutado en tres ocasiones, desde 2011, para que la SISALRIL diga cómo es que se va a implementar la Atención Primaria. La última vez fue en octubre pasado y aunque el plazo venció hace cinco meses, todavía no hay una respuesta positiva del organismo", dice.

Andrés Astacio, presidente de la entidad, considera "esa propuesta de la SISALRIL debió ser sometida al CNSS a más tardar el 17 de enero pasado y hasta la fecha no se tiene conocimiento de su ejecución".

Afirma que con ese retraso se repite lo que se considera el pecado original del SDSS, "que es la no aplicación de algunos de sus elementos esenciales para que garantizar el pleno disfrute de las facultades físicas, mentales y sociales del individuo".