La abigarrada nómina de aspirantes a la presidencia de Haití se "redujo" a 53 candidatos con la renuncia del expresidente del Senado Simon Desras, a una semana hoy de los comicios que determinarán los dos candidatos que dirimirán la presidencia en los comicios finales del 27 de diciembre.

 En un comunicado Desras, del Partido para la Liberación de las Masas y la Integración Social, explicó que retiraba su candidatura en favor del opositor Jude Celestin, uno de los favoritos a ganar la primera vuelta de las elecciones en representación de la Liga Alternativa para el Progreso y la Emancipación de Haití.

Desras agregó que su decisión se debe a problemas relacionados con la organización de los comicios, incluyendo lo que calificó como "falta de claridad en la tabulación de los resultados" de las elecciones del 9 de agosto. Entonces se celebró la primera vuelta de las elecciones legislativas.

Entre los problemas, Desras citó la existencia de centenares de actos violentos y lo que calificó de comportamiento anómalo de la policía durante esos comicios, en los que murieron diez personas.

La decisión de Desras reforzó el favoritismo de Celestin quien ahora regresa a la carrera electoral liderando los sondeos y confiado en lograr el primer puesto que no obtuvo en 2010 cuando fue desplazado por un aspirante sorpresa, el actual mandatario, Michel Martelly.

Ese favoritismo se vio reforzado más aún con el apoyo de la estrella internacional del hip hop Wyclef Jean, cuya candidatura presidencial en 2010 fue rechazada por el Consejo Electoral Provisional (CEP) encargado de organizar las elecciones.

La postulación del cantante estuvo en duda ya que aparentemente no cumplía con el requisito de haber vivido en el país durante los cinco años anteriores a los comicios.

A través de una canción en creole, Jean anunció a los electores haitianos: "Ha llegado el momento, yo voto a Jude Celestin".

Entretanto el curso final de los comicios se vivía hoy en la capital haitiana en medio de un clima de escepticismo y la sombra de una repetición de los actos de violencia que enmarcaron la primera vuelta de las legislativas en agosto.

A esa atmósfera se refirió esta semana la enviada de las Naciones Unidas al país, Sandra Honoré, quien exhortó a que los comicios se desarrollen en un ambiente pacífico con la ayuda de la Misión de las Naciones Unidas para la Estabilización en Haití (Minustah) y la policía haitiana.

Por su parte, el embajador de España en el país, Manuel Lorenzo, exhortó a todos los sectores políticos a apoyar el clima de estabilidad política y social que aliente el desarrollo de los procesos electorales en curso.

Además aseguró esta semana tras reunirse con el primer ministro haitiano, Evans Paul, que España apoya a todos los que han emprendido la tarea de organizar "elecciones inclusivas y transparentes".

El clima electoral se ha visto condicionado por el exceso de propuestas y candidatos, de los cuales se desconocen la mayoría de sus detalles y sus perfiles.

"No tengo ni siquiera idea quién es el favorito en esta elección y tampoco sé bien qué se propone. ¿Cómo voy a votar entonces?", se preguntó, Marcel Mondat, un panadero sexagenario de Puerto Príncipe.

Lucille Conais, una comerciante del centro de la ciudad, explicó a EFE que teme que a medida que pasen los días hasta la elección ocurran actos de violencia similares a los acaecidos el 9 de agosto.

"Es lo que temo y eso me hace dudar de si iré a votar y de si los resultados serán claros", dijo.

A ese ambiente de dudas han contribuido las encuestas, de las que muchos dudan de su fiabilidad, las cuales dan como favoritos de Jude Celestin, al oficialista Jovenel Moise del Partido Haitiano Tet Kale (PHTK), Maryse Narcisse -una de las seis mujeres que se presentan- de Familia Lavalas del expresidente Jean-Bertrand Aristide.

El próximo 25 de octubre se celebrará también la segunda vuelta de las legislativas y las municipales.

Joseph Guyler Delva/EFE